El presidente en funciones de Asaja Castilla-La Mancha, José María Fresneda, ha señalado este martes que es «prematuro» que la Junta de Castilla-La Mancha haya flexibilizado las restricciones aplicadas por la viruela a ganaderías de ovino y caprino ubicadas en las provincias de Albacete, Ciudad Real, Toledo y Cuenca. Según Fresneda, «se podría haber aguantado una semana más y no hubiera pasado nada».
Ante esta situación, el presidente en funciones de Asaja ha manifestado su deseo de que el decreto de indemnizaciones por perdida de renta «se ponga encima de la mesa en paralelo». «Quien pierde de verdad es el ganadero y es el que tiene que recibir las ayudas ya», ha añadido. Por este motivo, Fresneda se ha mostrado convencido de que los 26 millones de euros que Asaja estima que son necesarios para el sector debido a la viruela se «acercarán mucho» a los que establezcan entre la Junta y el Gobierno central en ayudas para los ganaderos.
La flexibilización de las medidas por la viruela ovina ha sido recibida con preocupación por parte de Asaja, que espera que el Gobierno de Castilla-La Mancha y el Gobierno central se pongan de acuerdo para ofrecer a los ganaderos las indemnizaciones necesarias para compensar las pérdidas sufridas por el brote de viruela.