Las organizaciones sindicales con representación en la Empresa Pública de Gestión Ambiental de Castilla-La Mancha (Geacam) expresaron su descontento el jueves pasado en la sede de la Consejería de Desarrollo Sostenible en Toledo. Su principal demanda es que se contrate a los bomberos forestales eventuales y fijos-discontinuos durante todo el año, ya que consideran que son necesarios para tareas más allá de la extinción de incendios.
En la protesta participaron representantes de CCOO, CSIF, SIBF, UGT, USO, STAS, Solidaridad Obrera y el Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB), acompañados por medio centenar de bomberos forestales. Portaban pancartas con mensajes como «No nos escuchas ni cuando nos quemamos vivos» o «Por el empleo estable en Geacam».
Manuel Amores, secretario de la sección sindical de CCOO y presidente del Comité de Intercentros de Geacam, mostró su queja por la falta de ampliación de contratos para 400 compañeros que han estado trabajando en labores de extinción durante esta campaña. Se les comunicó una semana antes de que finalizara que debían dejar de trabajar. Amores expresó su descontento por ser tratados como «simples clínex» que solo se utilizan temporalmente y luego se desechan.
Por su parte, Iván Atienza, representante de CSIF, pidió volver al modelo anterior a 2012, cuando los interinos trabajaban el mismo tiempo que los demás trabajadores. También solicitó una explicación sobre por qué, a pesar de que en un principio se les iba a prolongar el contrato, Hacienda no dio la autorización a última hora. Atienza lamentó que se estén produciendo recortes y señaló que estos trabajadores también realizan otras labores además de la extinción de incendios, como ayudar en inundaciones o búsqueda de personas desaparecidas en otoño e invierno. También criticó la inversión de dinero público en la formación de trabajadores que luego no se vuelven a contratar.
Iván García, delegado por Toledo de FeSP-UGT en Geacam, destacó la importancia del personal de Geacam, especialmente dado que las temporadas de riesgo de incendio se alargan cada vez más. García criticó las condiciones laborales precarias de los bomberos forestales y alertó sobre la fuga de personal a otras comunidades autónomas con mayor estabilidad laboral. También mencionó el envejecimiento de la plantilla de Geacam en Castilla-La Mancha y resaltó la contribución de estos trabajadores a la repoblación y desarrollo de zonas despobladas de la región.
Estas protestas continuarán durante el tiempo que sea necesario, ya que los sindicatos consideran que los bomberos forestales son imprescindibles en la prevención de incendios y en otras tareas más allá de la extinción. Exigen contratos estables para todo el año y denuncian la precariedad laboral.