El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha afirmado que es difícil predecir el resultado de las elecciones autonómicas, pero ha dado por hecho que solo PSOE, PP y Vox tendrán representación en el Parlamento. Aunque las encuestas le van «bien» al presidente, ha advertido de que la suma entre los partidos de la derecha es «perfectamente posible».
Durante su participación en el II Foro Económico Español de Castilla-La Mancha organizado por El Español en Toledo, Page ha subrayado que Ciudadanos y Unidas Podemos no tendrán presencia en el Parlamento castellanomanchego, por lo que «la diatriba es sencilla y de vértigo»: «O tengo mayoría para gobernar o se imponen PP y Vox».
El presidente ha recordado la reforma legislativa electoral del PP en 2015, cuando el partido gobernaba en la Comunidad Autónoma, con la intención de «aniquilar al PSOE». Así, ha explicado que el PP aumentó el número de diputados, pero «cada vez que salía un millón más de Bárcenas, quitaba un diputado», lo que les llevó a revertir la reforma año y medio antes de las elecciones de 2015 para reducir el número de escaños a 33.
En conclusión, García-Page ha reconocido que las encuestas le van «bien» en la actualidad, pero ha advertido de que la suma entre PP y Vox es «perfectamente posible».