Un trágico suceso ha conmocionado a la pequeña localidad de Mocejón, en Toledo, donde un niño de 11 años perdió la vida asesinado de manera violenta tras ser apuñalado por un individuo encapuchado en el campo de fútbol del polideportivo Ángel Tardío. El incidente tuvo lugar durante la mañana de un domingo, alrededor de las 9:45 horas, mientras el menor disfrutaba de un juego con otros niños.
De acuerdo con los informes preliminares, el agresor, cuya identidad aún se desconoce, llegó al lugar cubierto con una capucha y un pañuelo que le ocultaba el rostro. Una vez dentro del campo de fútbol, se dirigió de forma violenta hacia un grupo de personas presentes en la zona y luego se enfocó en los niños que se encontraban jugando. La víctima fue descubierta en un estado crítico en la banda del campo, cerca de las gradas, y lamentablemente falleció antes de poder ser trasladado, a pesar de los esfuerzos de los servicios de emergencia.
La Guardia Civil ha desplegado una intensa investigación bajo el nombre de Operación Jaula, movilizando varias patrullas para dar con el paradero del agresor. Se cree que el atacante huyó en un vehículo Ford Mondeo de color gris. Las autoridades están utilizando las cámaras de seguridad del polideportivo y del municipio, que incluyen lectores de matrícula, en un intento por identificar y capturar al responsable del crimen.
Aunque el campo de fútbol estaba cerrado al público en el momento del ataque, los niños, incluido el fallecido, habrían ingresado por una valla rota. Se presume que el agresor accedió al recinto por el mismo punto.
La alcaldesa de Mocejón, Conchi Cedillo, se presentó en el lugar de los hechos para brindar apoyo a los servicios de emergencia y a la comunidad local. La noticia ha generado una profunda conmoción en el municipio, y numerosos vecinos se han reunido en las inmediaciones del polideportivo para expresar su pesar y sorpresa ante lo sucedido. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, también se mostró consternado por el trágico incidente y expresó su solidaridad con la familia del menor, así como su deseo de que se haga justicia.
El caso sigue siendo investigado, y se espera que las pruebas recolectadas a través de las cámaras de seguridad y las labores en el terreno conduzcan a la pronta captura del agresor.