El yacimiento de Guarrazar, situado en la provincia de Toledo, está atravesando una significativa intervención en un ‘delubrum’, un espacio de origen romano vinculado a un manantial de agua que con el tiempo adquirió un trasfondo cristiano. A lo largo de la historia, este lugar se ha convertido en un centro de sanación y peregrinación.
Dicha intervención es crucial para garantizar la conservación de las estructuras del yacimiento, así como su restauración y la valorización de su gran importancia como referente histórico. Durante una reciente visita al yacimiento, Joaquín Romera, vicepresidente de la Institución provincial, acompañado de Sagrario Gutiérrez, alcaldesa de Guadamur, y Juan Manuel Rojas, arqueólogo encargado del proyecto, enfatizó la relevancia de la colaboración institucional en la defensa de un patrimonio que es de todos.
El yacimiento de Guarrazar, aclamado por su excepcional valor patrimonial, se encuentra en un estado crítico de conservación. Esta situación ha vuelto urgente la intervención para prevenir la pérdida irreversible de sus estructuras, que datan de los siglos VI a VIII después de Cristo, según un comunicado de la Diputación de Toledo.
El proyecto actual persigue varios objetivos clave, como la conservación preventiva, la restauración funcional del espacio, la valorización del mismo para facilitar su comprensión y asegurar su sostenibilidad a largo plazo. Romera recordó que «hoy estamos en Guarrazar, un yacimiento único que nos recuerda la tremenda riqueza histórica y cultural de nuestra tierra». Es importante recordar que en 1858 se halló el notable tesoro visigodo en este lugar, estableciendo a Guarrazar como un destacado punto de referencia para entender la historia visigoda y la evolución cultural de Toledo.
La alcaldesa Gutiérrez manifestó su agradecimiento a la Diputación de Toledo por el respaldo a esta intervención, considerándola un paso fundamental para el municipio. Según ella, «no solo se garantiza la conservación de un legado histórico de valor incalculable, sino que también se abre la puerta a nuevas oportunidades de conocimiento, turismo y desarrollo».
Este proyecto, impulsado por la Diputación de Toledo en colaboración con el Ayuntamiento de Guadamur, reafirma su compromiso con la valorización del patrimonio provincial. Romera destacó que el propósito es claro: «conservar para seguir transmitiendo la historia, porque solo así podremos legarla a las futuras generaciones con todas las garantías». Con esta iniciativa, la Diputación reitera su firme apoyo a la protección del patrimonio cultural de la provincia, entendiendo que la conservación y difusión de la historia de Toledo no solo salvaguarda su legado, sino que también genera oportunidades de desarrollo social, cultural y turístico para los municipios.
