Con inversión de más de 1,2 millones, Vega Baja se convertirá en un espacio verde innovador y de encuentro.

La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, ha presentado la primera fase de las obras de recuperación del parque arqueológico de la Vega Baja, con el objetivo de crear un nuevo espacio de convivencia y un lugar de interés cultural y medioambiental en torno a este Bien de Interés Cultural. Se prevé una inversión de más de 1,2 millones de euros y se desarrollará en una superficie de más de 44,000 metros cuadrados.

Según ha destacado Tolón, esta intervención es el resultado de la colaboración entre las distintas administraciones y se está fomentando un nuevo eje de movilidad sostenible a través de carriles bici y senderos biosaludables. Además, esta operación está diseñada para encajar en la planificación urbana de Toledo, incluyendo la recuperación de las riberas y el proyecto del Nuevo Palomarejos.

La primera fase del proyecto comprende un área de 30,000 metros cuadrados con un carril bici, una rampa accesible y la puesta en valor del yacimiento, con paseos y vegetación. También se plantea la puesta en valor y musealización de los restos visigodos del yacimiento arqueológico, así como su ordenación física para el paso de visitantes y comunicaciones peatonales.

Tolón ha destacado que esta obra es necesaria para la recuperación de los caminos históricos toledanos y que se está abordando con el diálogo y el consenso necesarios. José Gutiérrez, delegado provincial de Cultura, ha destacado la importancia de esta actuación para la ciudad y la región, ya que pone en valor un patrimonio cultural e histórico muy importante.

En resumen, se busca transformar la Vega Baja en un innovador espacio verde de encuentro con una inversión superior a 1,2 millones de euros, que incluye carriles bici, senderos biosaludables, la puesta en valor de restos arqueológicos y la recuperación de los caminos históricos de Toledo.

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