El compromiso del Ayuntamiento de Toledo con la preservación de la calidad del río Tajo ha sido destacado recientemente por el alcalde Carlos Velázquez en declaraciones a los medios. El enfoque municipal se centra en evitar puntos de vertido contaminantes dentro de la ciudad, así lo manifestó durante el encuentro del Consejo del Pacto de la ciudad de Toledo por el Tajo.
Velázquez enfatizó que las competencias directas del Ayuntamiento son prioritarias, aunque temas como los trasvases están fuera de su autoridad. A pesar de las discusiones sobre el trasvase Tajo-Segura y las demandas de mayor suministro hídrico por parte del Levante, el alcalde aclaró que estas cuestiones no influyen en las acciones locales.
Se han logrado avances en la eliminación de varios vertidos detectados en la ciudad, con la planificación de suprimir más en un futuro cercano. Se ha puesto especial atención en controlar desbordamientos que podrían llevar materiales nocivos al río, como las toallitas, proponiendo la instalación de sistemas de mallas en los colectores.
El aprovechamiento y reutilización de aguas antes vertidas al río también ha sido abordado, como en el caso del campus de la UCLM en la Fábrica de Armas. Además, se plantea regular el vertido directo al Tajo desde las terrazas de verano de la Peraleda exigiendo el uso de baños químicos.
En cuanto a las infraestructuras de saneamiento, el proceso de licitación de la depuradora del Polígono continúa siendo un punto crítico por sus vertidos a la ciudad.
Estas medidas se suman a los esfuerzos por convertir las riberas del río Tajo en un lugar recreativo y de descanso para los habitantes de Toledo. El alcalde concluyó enfatizando la importancia de gestionar el agua a nivel nacional y mantener el enfoque municipal en mejorar el bienestar del río Tajo en su paso por la ciudad.