El comunicado emitido recientemente por el Cabildo de la Catedral de Toledo aclara que la institución no tiene la autoridad para decidir sobre el traslado de los restos mortales de los reyes godos Recesvinto y Wamba. De acuerdo con el comunicado, la Catedral actúa únicamente como depositaria de dichos restos, siguiendo las directrices establecidas por el Gobierno de España.
Desde 1845, la Catedral ha sido responsable de los restos luego de la destrucción de la cripta de Santa Leocadia durante la ocupación francesa. Originalmente, los restos fueron ubicados allí por orden del rey castellano Alfonso X el Sabio en 1274. Sin embargo, con la demolición de la cripta, el Gobierno en ese momento ordenó trasladar los restos al Ochavo del templo como medida temporal.
En 2017, el Cabildo de la Catedral decidió reubicar definitivamente los restos, considerando que no debían permanecer en el Ochavo al no ser considerados reliquias de santos. La Capilla del Corpus Christi o Mozárabe fue elegida como nuevo emplazamiento por ser más acorde al contexto histórico y espiritual de los monarcas.
El traslado de los restos se llevó a cabo el 27 de noviembre de 2017, con una preparación adecuada de la sepultura en la Capilla Mozárabe. En un acto solemne, los Canónigos Capellanes Mozárabes realizaron el traslado procesional desde el Ochavo hasta la nueva capilla, seguido por una eucaristía según el rito Hispano-Mozárabe.
Anualmente, la Catedral celebra una misa funeral en honor a los reyes Recesvinto y Wamba alrededor del 1 de septiembre. En esta ceremonia participan miembros del Cabildo, representantes de la Real Casa de los Godos y otros Capítulos afines, rindiendo homenaje y pidiendo por el eterno descanso de estos monarcas visigodos.
En resumen, la Catedral de Toledo no tiene la potestad de decidir sobre el traslado de los restos de Recesvinto y Wamba, pero sí cumple con su papel de depositaria y conmemora anualmente a estos históricos reyes.

