En la apacible localidad de Arcicóllar, en la provincia de Toledo, la iglesia mudéjar de Nuestra Señora de la Asunción ha revelado un emocionante secreto que resalta aún más su valor histórico y artístico. Recientes investigaciones han descubierto un conjunto pictórico mural de gran importancia datado alrededor del año 1500, que estaba oculto en su ábside románico mudéjar.
El extraordinario hallazgo fue dado a conocer a través de un comunicado de prensa emitido por Pequeños Arqueólogos, quienes enfatizaron que los pueblos albergan un vasto patrimonio que a menudo es pasado por alto y subestimado, y que son habituales los descubrimientos de tesoros patrimoniales.
El descubrimiento se produjo después de que el párroco de la iglesia, Ignacio López, y el arqueólogo Rubén Pérez, sospecharan de la existencia de restos pictóricos detrás del retablo mayor. Para confirmar sus sospechas, buscaron la asesoría de Santiago Manzarbeitia y Fernando Pérez Suescun, reconocidos expertos del Departamento de Historia del Arte de la Universidad Complutense de Madrid. Tras exhaustivos estudios, los profesores confirmaron que los restos forman parte de un valioso conjunto mural de mayor alcance de lo imaginado inicialmente.
El conjunto de pinturas descubierto se centra en una escena principal de la Asunción de la Virgen, en línea con la devoción histórica del templo. Además, se identificaron otras escenas del ciclo de la Natividad, como la Anunciación, la Visitación y la Epifanía o Adoración de los Magos. Una característica destacada es la representación del apóstol Santiago como caballero de la Orden de Santiago, acompañado de una inscripción votiva.
La técnica utilizada en las pinturas involucra un marcado grafismo negro que delinea cada figura, con toques de rojo, ocre y blanco resaltando detalles específicos, lo que sugiere una fecha de creación alrededor del año 1500. El paso del tiempo y el enlucido de cal que cubrió las obras han hecho que solo partes de estas sean visibles, lo que plantea la necesidad de una intervención para descubrir y restaurar completamente el conjunto.
La existencia de estos retablos murales es típica en iglesias rurales de la baja Edad Media, dada su rápida ejecución y una técnica económica. Con el tiempo, estos murales fueron ocultados por retablos de madera, lo que los ha preservado parcialmente hasta su redescubrimiento. La comunidad científica y cultural espera con entusiasmo la restauración de este valioso conjunto pictórico, que promete enriquecer la historia y el patrimonio artístico de la región.