En un acto de descontento, 85 técnicos de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) se han reunido en Toledo el lunes para protestar por el estancamiento en su situación profesional, que consideran que afecta al rendimiento de la Administración. La caída en un 82% en el número de denuncias por presuntos delitos fiscales es un claro indicador de esta situación. Los manifestantes instan a la Dirección de la AEAT a abordar estos problemas urgentemente.
A nivel nacional, más de 3.000 técnicos han comenzado concentraciones frente a las delegaciones de la AEAT, siguiendo la iniciativa del sindicato de técnicos de Hacienda (Gestha), con el objetivo de prevenir un posible colapso en la próxima campaña de la renta.
Estas protestas son la tercera serie de concentraciones a nivel estatal, sucediendo a dos previas en las que aproximadamente 2.000 técnicos expresaron su frustración y exigieron soluciones a la paralización de la carrera profesional, problemas de movilidad y gestión de recursos humanos deficientes por parte de la AEAT.
Gestha ha detallado seis motivos principales que impulsan estas concentraciones, incluyendo el estancamiento en la carrera profesional, incumplimientos en la Disposición Adicional Cuarta de la Ley Antifraude de 2006 y la falta de ajuste de los puestos de trabajo a la complejidad y responsabilidad de cada tarea. También se ha cuestionado la posición y remuneración de los técnicos, así como la dificultad para acceder a movilidad geográfica y problemas con los traslados.
Además, se critica la promoción interna y la racionalización de los procesos selectivos a cuerpos superiores, señalando que la promoción interna al cuerpo de inspectores no valora suficientemente la experiencia y conocimiento técnico de quienes llevan años en la AEAT.
Estas demandas resaltan la importancia de atender las necesidades de un colectivo fundamental en la lucha contra el fraude fiscal y la eficiencia de la gestión tributaria en España.
