El líder del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha realizado duras críticas hacia el gobierno regional presidido por Emiliano García-Page. En una rueda de prensa en Toledo, Núñez ha acusado al gobierno de llevar a la comunidad a una «ruina económica y social» debido a una gestión «burocratizada» y a la figura de un presidente «en tierra de nadie».
Núñez ha señalado que, en comparación con otras regiones como la Comunidad Valenciana, Madrid y Andalucía, donde se han implementado políticas de reducción de impuestos y fomento del crecimiento, Castilla-La Mancha permanece estancada y perdiendo oportunidades continuamente.
El presidente del PP en la región ha manifestado que Page ha perdido credibilidad, acusando a sus diputados de alinearse con políticas que permiten a los independentistas, incluyendo a Puigdemont, tener más influencia en la política nacional. Además, ha expresado su preocupación por las pérdidas financieras de la región, señalando que Castilla-La Mancha pierde más de 300 millones de euros al año en comparación con otras comunidades autónomas.
Núñez también ha criticado los enfrentamientos entre Page y Sánchez, argumentando que no han servido para evitar la amnistía, incrementar recursos hídricos o regularizar pozos en La Mancha. En cuanto a fiscalidad, ha destacado la creación de un nuevo impuesto por parte del gobierno de Page, que impactaría en las finanzas de familias, comercios y pequeñas industrias.
El dirigente popular ha recordado una protesta en Toledo contra la implementación de un nuevo tributo, donde unos 300 alcaldes y concejales se manifestaron en rechazo a la carga fiscal adicional. Para cerrar, Núñez ha resaltado la necesidad insatisfecha de recuperar la carrera profesional sanitaria y el adeudo del gobierno central a la comunidad en materia de dependencia.
En resumen, Núñez ha cuestionado la efectividad del presidente García-Page y ha señalado las áreas donde considera que la gestión del gobierno regional ha contribuido al declive de Castilla-La Mancha.
