Desde su nombramiento en marzo de 2013 hasta su fallecimiento, el Papa Francisco ha mantenido una relación significativa con Castilla-La Mancha, dejando una huella marcada por la interacción y el apoyo a la comunidad católica de la región. Un momento clave en esta conexión ocurrió el 3 de abril de 2014, cuando recibió por primera vez a un alcalde de Castilla-La Mancha, Juan Antonio Callejas, de Villamayor de Calatrava. Durante esta audiencia, el edil tuvo la ocasión de presentar al Papa una imagen de la Virgen del Rosario y documentación sobre las Fiestas de Mayo.
Durante su pontificado, Francisco ha nombrado a cinco nuevos obispos para la región y ha concedido cuatro años jubilares. También ha prometido visitar Toledo con motivo del VIII Centenario de la Catedral Primada, con celebraciones que iniciarán el próximo año, así como la continuidad del Año Jubilar de Urda desde septiembre de 2025.
Una de sus primeras interacciones significativas con los obispos de Castilla-La Mancha se produjo el 24 de febrero de 2014, durante la visita ‘Ad Limina Apostolorum’, donde recibió a un grupo de 83 prelados, quienes se reunieron con él en dos sesiones el 3 de marzo siguiente. En junio de 2017, recibió al entonces arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, en compañía de un grupo de mujeres del Grupo Santa Teresa, que apoya a mujeres separadas en la archidiócesis.
Uno de los gestos más emotivos del Papa ocurrió en abril de 2023, cuando recibió a un grupo de personas con discapacidad intelectual de la Fundación Madre de la Esperanza de Talavera de la Reina. Igualmente, en noviembre del mismo año, se reunió con representantes del Convento de Agustinas de Talavera de la Reina para conmemorar el 450 aniversario de la institución.
El Papa ha brindado un fuerte apoyo a festividades y eventos católicos en la comunidad. En octubre de 2014, la Archicofradía de la Purísima Concepción, patrona de Escalona, recibió el privilegio papal de declarar un Año Jubilar en conmemoración del 75 aniversario de su bendición, culminando con una ceremonia de coronación en junio de 2015. En noviembre de 2015, participó activamente en la promoción de la figura mística de Santa Teresa de Jesús mediante la ruta ‘Huellas de Teresa’, que atrajo a miles de visitantes a la región.
En mayo de 2018, el Papa concedió, por primera vez en la historia de la diócesis de Sigüenza-Guadalajara, un Año Jubilar extraordinario en honor al 850 aniversario de su catedral. Esta noticia fue comunicada por el entonces obispo de la diócesis, Atilano Rodríguez, y representa un hito importante en la historia de la Iglesia local.
Además, en marzo próximo, una representación de los Armaos de Calzada de Calatrava participará en un desfile ante el Papa en el Vaticano. Esta tradicional manifestación destaca la riqueza cultural de la región y forma parte de la Ruta de la Pasión Calatrava, reconocida como de Interés Turístico Nacional.
Los presentes con sello de Castilla-La Mancha también han contribuido a cimentar el vínculo con el Papa, quien recibió una cruz damasquinada de la exalcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, así como una imagen de la Virgen de Los Llanos como regalo de cumpleaños, de manos de Francisco Sevilla, en diciembre de 2019.
No obstante, la relación ha estado marcada por algunas controversias. En mayo de 2019, el Papa aceptó la dimisión de un sacerdote de la Diócesis de Ciudad Real debido a acusaciones de abuso, reflejando su firme postura ante la pederastia en la Iglesia. También, en febrero de 2022, un comentario irónico de un sacerdote de la diócesis deseando que el Papa “fuera al cielo cuanto antes” causó revuelo en la comunidad.
A lo largo de su pontificado, el Papa Francisco ha dejado un legado perdurable en Castilla-La Mancha, combinando fe, tradición y un compromiso claro con las problemáticas tanto de la Iglesia como de la sociedad.
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