El Gobierno de Castilla-La Mancha ha decidido desactivar, a las 11:00 horas de este lunes, el Plan Específico ante el Riesgo de Inundaciones en Castilla-La Mancha (Pricam), que se encontraba en fase de Emergencia con Situación Operativa 1 en las provincias de Toledo y Guadalajara, mientras que el resto de la región estaba en fase de Alerta. Esta medida se tomó tras observar la evolución favorable de las predicciones emitidas por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y el control sobre el volumen de los desembalses, que habían impactado especialmente en Toledo y Guadalajara.
Aunque los desembalses continúan, su magnitud ha disminuido considerablemente, muy por debajo de los niveles máximos alcanzados los días 22 y 23 de marzo. Además, no se han registrado nuevos incidentes, lo que ha propiciado la desactivación del plan. Recordemos que el Pricam se activó el 8 de marzo, en fase de Alerta con Situación Operativa 0, motivado por las intensas lluvias que habían comenzado en varias provincias y que podían aumentar los caudales de ríos y arroyos.
Desde su activación, la Confederación Hidrográfica del Tajo proporcionó información sobre los vertidos de diversas presas y sus posibles consecuencias. En el mismo día del inicio del plan, se enviaron alertas a varios municipios de Guadalajara respecto al riesgo de inundación provocada por el desembalse de las presas de Beleña y Pálmaces, así como sobre otros desembalses que podrían impactar el caudal del río Alberche en Toledo.
El 9 de marzo, la Confederación Hidrográfica del Tajo notificó un incremento en el caudal de desembalse de varias presas. Ante la previsión de nuevos desembalses, se consideró la evacuación del municipio de San Andrés de Congosto como medida preventiva, aunque finalmente no fue necesaria.
Durante los 30 días de activación del Pricam, se registraron 265 incidentes, la mayoría en las provincias de Guadalajara y Toledo. Las incidencias más frecuentes fueron inundaciones en espacios abiertos y cerrados, así como obstáculos en las carreteras y desprendimientos. Los municipios más afectados en Toledo incluyeron Santa Cruz del Retamar, Hormigos, Talavera de la Reina y, en particular, Escalona, donde varias viviendas cercanas al río Alberche fueron evacuadas.
La Dirección del Plan Específico por Inundaciones coordinó esfuerzos y mantuvo informados a los ayuntamientos y autoridades relevantes. En este período, se realizaron 17 reuniones del comité asesor del Pricam, presididas por el consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Ruiz Molina.
Por otro lado, diversos cuerpos de emergencia y voluntarios de Protección Civil estuvieron activos durante estos días, y se movilizó la Unidad Militar de Emergencia (UME) para construir un dique de contención. A pesar de las incidencias, no se han reportado daños personales, aunque se recomienda seguir manteniendo precauciones en las orillas de los ríos afectados por las crecidas.
La noticia sobre la desactivación del Plan Especial ante el Riesgo de Inundaciones en la región de Castilla-La Mancha fue publicada primero en Diario de Castilla-la Mancha.