El Gobierno de Castilla-La Mancha ha puesto de relieve su papel destacado en el censo de lince ibérico de 2024, contabilizando un total de 942 ejemplares. Esto equivale al 46% de la población nacional y al 39,2% de toda la península ibérica. A pesar de estos "excelentes" resultados, la consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, ha señalado que todavía "no es suficiente" y ha instado a seguir trabajando en la conservación de esta especie amenazada.
En una rueda de prensa celebrada el jueves, Gómez manifestó su "gran orgullo" por presentar un censo que se considera "espectacular" para la región. Aunque Andalucía ha encabezado de manera constante el censo del lince ibérico, este año Castilla-La Mancha ha logrado, por primera vez, ocupar la primera posición. La consejera atribuyó este éxito, en parte, a la liberación de ejemplares criados en cautividad tanto en Andalucía como en Portugal.
El censo indica que de los 942 linces en Castilla-La Mancha, 537 son adultos y 175 son hembras reproductoras, una cifra significativa considerando que el total de hembras reproductoras en el país es de 470. Además, 2024 ha visto el nacimiento de 405 cachorros de lince ibérico en la región, estableciendo un récord que sugiere que "el lince se siente muy cómodo" en el entorno castellanomanchego. La tasa de fertilidad en la región también supera la media nacional, con 2,3 cachorros por hembra, comparado con el 1,8 a nivel nacional.
Los seis núcleos de población de lince en Castilla-La Mancha muestran variaciones notables en sus poblaciones. El núcleo más numeroso es el de Montes de Toledo, que alberga 468 linces, seguido por Sierra Morena Oriental con 305 y Sierra Morena Occidental con 134. También se incluyen núcleos como Campos de Hellín (11 ejemplares), Sierra de Relumbrar (5) y Higueruela (2). En cuanto a las zonas de transición que conectan poblaciones, La Jara cuenta con 12 linces, Urda con 3 y Cabañeros con 2.
A pesar de estos avances, la consejera subrayó una preocupación significativa: la mortalidad del lince. En el último año, se han registrado 214 muertes, de las cuales 75 ocurrieron en Castilla-La Mancha. Las principales causas incluyen 50 muertes por atropellos, 9 por diversas enfermedades y 16 por otras razones.
Para abordar este desafío, la Consejería de Desarrollo Sostenible está colaborando con la Consejería de Fomento para implementar señalización específica en las carreteras de mayor tráfico de linces y vallados especiales que ayuden a prevenir la mortalidad de estos animales en áreas de riesgo. "Debemos seguir apostando fuertemente por la conservación de esta especie emblemática y fomentar la responsabilidad de todos los ciudadanos", concluyó Gómez.
La noticia completa sobre el liderazgo de Castilla-La Mancha en el censo del lince puede encontrarse en el Diario de Castilla-La Mancha.