En el dinámico mundo del interiorismo, el baño está dejando atrás las cortinas de plástico, antes símbolo de una estética de épocas pasadas, para transformarse en un espacio de modernidad y sofisticación. Mirando hacia el futuro, se espera que para 2025 los baños experimenten una metamorfosis que refleje tendencias mucho más refinadas y estilizadas, cambiando radicalmente la percepción de uno de los lugares más íntimos del hogar.
Las viejas cortinas de baño, habitualmente asociadas con hogares tradicionales o alojamientos de bajo perfil, están siendo reemplazadas por materiales mucho más selectos y prácticos. La expansión de opciones como paneles de vidrio, cortinas de tela resistentes al agua y lamas de madera tratada no solo modernizan el espacio, sino que también enriquecen la estética global del baño.
Conocidos interioristas están explorando cómo la iluminación y los acabados pueden complementar estos nuevos elementos. La combinación de materiales naturales, como la piedra y la madera, junto con toques metálicos, crean un ambiente acogedor y moderno. Sara Martínez, una experimentada diseñadora de interiores, explica: «El baño se está transformando en un espacio de bienestar personal, un santuario donde la funcionalidad se combina con el diseño. La idea es que cada elemento cuente una historia, y los materiales sean parte de esa narrativa».
Las duchas abiertas y las bañeras exentas también se suman a esta tendencia que aspira a replicar la atmósfera de un spa en casa. En ese entorno, las cortinas tradicionales quedan relegadas, ya que los diseños abiertos maximizan la luz natural y la percepción de amplitud. El baño del futuro busca exhibir, no ocultar, sus elementos.
Además, la sostenibilidad está jugando un papel determinante en esta evolución. La industria ha comenzado a responder a la creciente demanda de productos ecológicos con innovaciones que privilegian materiales reciclados y biodegradables, mezclando funcionalidad con respeto al medio ambiente.
Con todos estos cambios, el baño está en camino de convertirse en uno de los espacios más relevantes del hogar, donde cada detalle se elige cuidadosamente para ofrecer funcionalidad y un estilo que muestre el carácter y el buen gusto de los residentes. Este espacio, antes meramente utilitario, se perfila como un refugio de elegancia y confort, elevando los estándares de la decoración del hogar para el futuro cercano.
