Toledo, 10 de febrero de 2025.- Este fin de semana, un total de 35 alumnos, incluidos voluntarios de Protección Civil, miembros de la Policía Local y del Cuerpo de Bomberos, tomaron parte en dos cursos de formación que se centraron en el mantenimiento de vehículos sanitarios y su equipamiento, así como en técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y el uso del desfibrilador externo automático (DEA).
Las actividades tuvieron lugar en la Escuela de Protección Ciudadana de Castilla-La Mancha, bajo la supervisión de la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital. En la inauguración de los cursos estuvo presente Emilio Puig, director general de Protección Ciudadana, quien subrayó la importancia de estas formaciones para todos los involucrados.
El primer curso, denominado ‘Operaciones de mantenimiento preventivo del vehículo y control de su dotación material’, contó con la participación de 15 voluntarios de diferentes agrupaciones de Protección Civil de la región. Puig destacó que esta capacitación está diseñada para que los asistentes obtengan el certificado de profesionalidad de nivel II en Transporte Sanitario. En total, 14 miembros de Protección Civil de 13 localidades, además de un voluntario de Cruz Roja, participaron en esta jornada formativa, que tiene como objetivo optimizar los conocimientos sobre la gestión del vehículo sanitario para asegurar su operatividad ante cualquier emergencia.
Con una duración de 100 horas, el curso combina formación presencial y en línea. Los voluntarios deberán demostrar sus conocimientos a través de una evaluación a principios de abril. Los participantes vienen de varias localidades como Almansa y Valdeganga (Albacete), Tomelloso y Valdepeñas (Ciudad Real), así como de distintas zonas de Toledo y Cuenca.
Esta formación no solo se centra en reforzar las habilidades prácticas, sino que también permite a los voluntarios obtener una acreditación profesional oficial al finalizar el curso con éxito.
La segunda acción formativa estuvo dirigida a reciclar conocimientos sobre técnicas de reanimación cardiopulmonar y el uso del DEA, con la participación de 21 alumnos. Este curso se centró en el reconocimiento de la parada cardiorrespiratoria y en cómo manejar la situación en intervenciones individuales y en equipo. Se practicaron aspectos esenciales como la atención de la vía aérea y el uso del DEA, simulando situaciones con uno y dos intervinientes.
Los participantes provienen de diversas agrupaciones de Protección Civil y cuerpos de emergencia de la región, incluyendo localidades como Lillo y Escalona en Toledo, Villanueva de los Infantes y Villarrubia de los Ojos en Ciudad Real, y Huete en Cuenca. También participaron miembros de la Policía Local de varios municipios y bomberos de las provincias de Albacete y Cuenca.
Ambas iniciativas formativas representan un avance fundamental en la preparación de los voluntarios y profesionales que intervienen en emergencias, fortaleciendo su capacidad para salvar vidas y actuar de manera efectiva en situaciones críticas.
Esta noticia fue publicada originalmente en el Diario de Castilla-La Mancha.