El otoño es una estación que suele presentar retos para jardineros y aficionados a las plantas debido a sus condiciones climáticas menos favorables para ciertos cultivos. Sin embargo, la planta conocida como Cuna de Moisés, cuyo nombre científico es Spathiphyllum, ofrece la oportunidad de seguir disfrutando de su floración durante esta época si se observan ciertos cuidados específicos, especialmente en lo relativo al riego.
Originaria de las regiones tropicales de América, la Cuna de Moisés es valorada por su resistencia y su capacidad de florecer en diversas condiciones. No obstante, para que esta planta continúe produciendo flores en otoño, es esencial prestar atención al riego. En esta estación, la planta puede sufrir estrés hídrico, lo que puede perjudicar su capacidad de florecer.
El sustrato de la Cuna de Moisés debe mantenerse siempre ligeramente húmedo. Es crucial evitar tanto el exceso como la carencia de agua. Un error común es permitir que el sustrato se seque completamente entre riegos, lo que puede ocasionar la caída de las hojas y una floración deficiente. Se recomienda regar la planta cuando la parte superior del sustrato esté seca al tacto, evitando que llegue a estar completamente desecada.
Otro aspecto fundamental en el riego de la Cuna de Moisés es el uso de agua a temperatura ambiente. El agua fría puede causar un choque térmico en las raíces, inhibiendo la floración. Además, el agua utilizada no debe contener altos niveles de cloro o sales, ya que estos componentes pueden dañar la planta. El agua de lluvia o el agua destilada son opciones ideales para regar esta especie.
Es preferible realizar el riego durante las primeras horas del día o al atardecer para evitar la evaporación rápida del agua. Regar en las horas de mayor sol puede privar a la planta del tiempo suficiente para absorber el agua. Asimismo, es importante no dejar agua estancada en el plato debajo de la maceta, ya que esto podría causar la pudrición de las raíces.
Complementar el riego con un ambiente de humedad adecuada es esencial. La Cuna de Moisés, al ser una planta tropical, prospera en condiciones de alta humedad. En climas secos o en espacios con calefacción que reduzcan la humedad del aire, es recomendable rociar las hojas de la planta con agua regularmente o utilizar un humidificador en la habitación donde se encuentra.
Siguiendo estos consejos de riego y cuidados adicionales, los aficionados a la jardinería podrán disfrutar de la belleza y elegancia de la Cuna de Moisés durante todo el otoño, prolongando así la espléndida floración que esta planta puede ofrecer.
