Unión de Uniones de Castilla-La Mancha y la Plataforma de damnificados por la plaga de conejos han convocado una manifestación para el próximo miércoles 22 de febrero, a las 10.00 horas con salida desde la Plaza de toros de Toledo hasta la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, para exigir a la Junta de Comunidades que declare como «plaga» la invasión de conejos híbridos que está afectando los cultivos de la región.
Según ha explicado el presidente de Unión de Uniones de Castilla-La Mancha, Andrés García Vaquero, «pedimos que a través de esta declaración, sea la propia Administración regional quien ponga en práctica otros método para acabar con este conejo voraz; que sean ellos quienes establezcan los mecanismos que la ley permita porque con la caza no es suficiente».
Por su parte, el portavoz de la Plataforma de damnificados por la plaga de conejos, Florentino de Mora, ha destacado que según datos de Agroseguro, la media de las hectáreas con incidencias por daños, han sido en 2022 de 17.800 hectáreas, lo que supone que la plaga está afectando a unas 80.000 hectáreas de leñosos, almendros, olivar y vid principalmente, así como de cereal, con unas pérdidas de más de 50 millones de euros.
De Mora ha asegurado que esta situación afecta a miles de familias que sostienen el medio rural en nuestros campos de Castilla-La Mancha, y ante la indefensión que nos encontramos, muchas de ellas no encuentran otra opción que el abandono.
Por ello, desde Unión de Uniones y junto a la Plataforma se están llevando a cabo estudios científicos que demuestren la existencia de este conejo híbrido, «que no es el autóctono». Señalan que este conejo híbrido es «voraz, tiene camadas que multiplican el número de crías, pasando de 3 ó 4 a 7 u 8 crías y duplican también el número de camadas al año, provocando un crecimiento exponencial; es un conejo que prácticamente duplica su peso y tamaño y es trepador y roedor».
Por todo ello consideran insuficiente la declaración de emergencia cinegética temporal por daños de conejos declarada por la Junta de Castilla-La Mancha, ya que cada vez son más los municipios afectados, pasando en los últimos años de 80 a cerca de las 300 localidades de la región afectadas actualmente.
Por ello, proponen autorizar la caza en todas sus modalidades y sin plazo temporal, llevar a cabo un estudio que dilucide en qué momento, cómo y por qué ha aparecido este conejo tan dañino, eliminar el nuevo Plan de gestión el fomento del conejo en aquellos términos municipales en los que se ha declarado zona de emergencia cinegética, vallar y conservar las vallas con mallas conejeras en los espacios naturales protegidos, promover la limpieza de las riberas y los cauces de los ríos y veredas, autorizar la eliminación de majanos, lindes u otros elementos del paisaje, exención de cumplimiento de las condiciones de la PAC y de los ecoregímenes a las explotaciones afectadas, exención de impuestos o la rebaja del IRPF total o parcial, según el grado de afectación, exención del pago del IBI o cualquier otro tipo de tributos y tasas relacionados con la actividad agraria o el uso de las tierras de cultivo, destinar una partida presupuestaria del Plan de gestión a indemnizar a los agricultores por pérdidas de renta como consecuencia de los daños, subvención del 100% para la adquisición de protectores para nuevas plantaciones de leñosos en los municipios declarados de emergencia cinegética y una subvención adicional del 50% de la prima de los seguros agrarios.
Convocan una manifestación para el miércoles 22 en Toledo para exigir a la Junta de Comunidades que declare como «plaga» la invasión de conejos híbridos que está afectando los cultivos de la región. La entrada se llevará a cabo desde la Plaza de toros de Toledo hasta la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, para exigir medidas compensatorias que ayuden a los agricultores afectados. Desde Unión de Uniones de Castilla-La Mancha y la Plataforma de damnificados por la plaga de conejos se están llevando a cabo estudios científicos que demuestren la existencia de este conejo híbrido, «que no es el autóctono».
